lunes, 26 de septiembre de 2011

LOS ALARMANTES ÍNDICES DE LA EDUCACIÓN

LOS ALARMANTES ÍNDICES DE LA EDUCACIÓN

Manuel Rojas Pérez
Correo del Caroní, lunes, 26 de Septiembre de 2011


La semana pasada iniciaban las actividades en todas las escuelas públicas. Pero eso no fue lo que pasó. La indolencia, la insensibilidad y la irresponsabilidad del gobierno chavista hicieron que en más de la mitad de las instituciones educativas públicas tuvieran que enviar a los muchachos de regreso a sus casas.

Y es que el colapso a nivel de infraestructura que hay en estas instituciones es simplemente alarmante. Datos de la Federación Nacional de Padres y Representantes (Fenasopadres) dan cuenta que por lo menos el 70% de las escuelas públicas están prácticamente por el suelo. Los baños no sirven, las aulas están desmoronadas, los techos cayéndose. En las pocas escuelas públicas donde pudo iniciarse el año escolar se ven problemas de salubridad como frisos mal hechos que hacen que el polvillo resultante de eso les cause problemas de asma a los alumnos.

Gravísimas, asimismo, las declaraciones el presidente de la Fundación Casa Arturo Uslar Pietri, Antonio Ecarri Angola. En rueda de prensa, y conminando a la ministra de Educación a cumplir su función, Ecarri denunció que para los alumnos del sistema público de educación se destinan apenas 1,27 bolívares diariamente para alimentación escolar. Es decir, que del presupuesto asignado para el Programa de Alimentación Escolar (PAE) al hacer una división entre la cantidad de alumnos registrados en escuelas públicas (todo esto con cifras oficiales del Ministerio de Educación y la Ley de Presupuesto para el 2011) da esa alarmante cifra ¿Quién puede comer con 1,27 bolívares? ¿La ministra de Educación o el Presidente de la República se alimentan con apenas 1,27 bolívares diarios? A nuestros niños se les trata como pordioseros, como pocas cosas. Y eso es simplemente inaceptable.

La educación no es solo impartir una serie de conocimientos. Todos los estudios indican que si un niño no está debidamente alimentado, los conocimientos que reciban simplemente pasarán por un lado y no serán asimilados. A diferencia de gobiernos anteriores -como el de Carlos Andrés Pérez que daba el vaso de leche escolar, del cual fui beneficiario por cierto- este gobierno chavista ha sido absolutamente inconsciente en su responsabilidad con los niños venezolanos. Esto demuestra que al chavismo no le interesa el futuro de Venezuela. Más aún, no le conviene que los niños se eduquen debidamente. Sin la alimentación, la educación simplemente no existe.

El sistema escolar debe ser inmediatamente replanteado. Como dijo por Twitter la presidenta de la Fundación Hatillana de Atención a la Infancia y a la Familia (Fundhainfa), Diana D’Agostino, educar consiste en construir ciudadanos cada vez más libres. Y hacia allá debe ir nuestra educación, como motor y punta de lanza de la sociedad venezolana.

Como también dijo por Twitter la coordinadora del Centro de Atención Integral de la misma fundación, María Elvira Rodríguez, la escuela debe convertirse nuevamente en el centro de encuentro de la comunidad y los maestros deben volver a ser la referencia moral de las localidades. La primera gran política pública de todo gobierno debe arrancar por ahí, por devolver a las escuelas el sitial que alguna vez tuvieron.

Mi abuela, María Silva de Rojas, por ejemplo, llegó a ser la directora de la Escuela Simón Rodríguez, en la populosa barriada caraqueña del mismo nombre. Ante mi abuela, según me cuenta, se presentaban las familias buscando consejo a sus problemas, en la escuela se resolvían de manera pacífica conflictos entre personas sirviendo el maestro casi como un juez de paz o simplemente se utilizaba la escuela como centro de encuentro de la zona, donde todos los ciudadanos compartían entre sí.

Para ello se necesita voluntad política, voluntad que no tiene este gobierno. Al contrario, en doce años han demostrado un total desprecio por la educación y por los niños. Eso debe cambiar. Eso va a cambiar. Ya para el 2013 los niños tendrán políticas públicas en ese sentido. Mientras tanto, la ministra de Educación debería trabajar y hacerse cargo.

Twitter: @rojasperezm

viernes, 23 de septiembre de 2011

EN OCTUBRE ES LA COSA

En octubre es la cosa

Manuel Rojas Pérez
Correo del Caroní, 19 de septiembre 2011

Ya tenemos fecha. El 7 de octubre de 2012 serán las elecciones presidenciales. El CNE anunció, casi con miedo, que ese día se definirá el futuro de Venezuela, entre reconstruir un sistema democrático, de progreso y bienestar para el pueblo o definitivamente desinstalar las instituciones de la democracia liberal con la cual, hasta ahora, Hugo Chávez no ha podido acabar.

7 de octubre. Suena lejos, pero está a la vuelta de la esquina. El chavismo está sacando sus cuentas. Deben estar pensando cómo hacer para poder aumentar los números y mantenerse en el poder. Porque aunque Schemel o Datanalisis digan lo contrario, el gobierno chavista está debajo en las encuestas. Como lo anunció Enrique Mendoza la semana pasada, si las elecciones fueran hoy, el gobierno perdería todas las gobernaciones. Y lo mismo aplica para la presidencia de la República.

El chavismo se sabe en minoría. Por ello recurren a utilizar la enfermedad del presidente como un factor de lástima, para lograr que los venezolanos se compadezcan del primer mandatario y le den otra oportunidad.

Pero el tiempo no se conmueve. Este no se detiene. Y ese es el gran drama del chavismo. Que con todo su poder, con los Poderes Públicos en su mano, con todo el dinero público manejado a su antojo, no pueden parar el tiempo.

Por ello, el chavismo se juega el todo por el todo, se juega a Rosalinda. Desde Miraflores se decidió colocar primero la elección presidencial, distanciada de las elecciones regionales y locales, no solo para mostrar solo la cara de Chávez sino para hacer que sus cuadros trabajen exclusivamente para su candidatura.

Este mismo tiempo, por supuesto, también corre para la oposición. De este lado de la acera también los tiempos se acortan. La gran diferencia es que el pueblo ya entendió que lo distinto al chavismo es lo que les asegura una mejor forma de vivir. Ya la gente sabe que no es solo un tema de principios fundamentales como la democracia, la libertad y el respeto, sino que salir electoralmente del chavismo implica poder tener luz, agua, seguridad, comida.

Pero no hay tiempo que perder. Ese 7 de octubre de 2012 está ahí mismito. Como he insistido desde hace mucho tiempo, la campaña electoral no debe esperar a las elecciones primarias del 12 de febrero de 2012, sino que debe hacerse desde ya. Hace mucho tiempo que se debió iniciar la campaña. Y en efecto, salvo un par de excepciones, los precandidatos, y los que no lo son, vienen haciendo campaña electoral desde principio de este año, para llevarle a la gente la palabra y las propuestas de la oposición. Ahí está, por ejemplo, Antonio Ledezma quien tiene por lo menos cinco meses girando por todos lados mostrando su mensaje. Igualmente Pablo Pérez desde que anunció formalmente su aspiración, se lanzó de lleno por todo el país. El mismo Leopoldo López, aun cuando estaba inhabilitado, estuvo rodando y creando redes, hablando con la gente desde hace bastante tiempo. Incluso, Henry Ramos Allup, sin ser candidato presidencial, ha recorrido todo el país explicándole a la gente porque hay que salir de este gobierno.

En este tiempo se debe ratificar y solidificar aun más la necesaria unidad para derrotar al chavismo. Para ello, la Mesa de la Unidad Democrática se convierte en gran garante. Ya en las elecciones parlamentarias el fantasma de la desunión rodeó muchas candidaturas y circuitos. Sin embargo, la MUD demostró ser ese gran factor de gestión y gerencia política que necesitábamos desde hace tanto y logró, en esos circuitos, una unidad casi perfecta.

En octubre entonces es la cosa. Gobierno y oposición saben que el 7 de octubre nos jugamos el todo por el todo. El chavismo se juega su supervivencia. Y la oposición se juega nada más y nada menos que el país.

Lo importante es que en ese 7 de octubre saldrá victoriosa Venezuela, porque ganará el candidato que resulte vencedor en las elecciones primarias. El chavismo tiene hasta el 7 de octubre, y un poco más, para gobernar, para hacer sus descalabros. Después de eso pasarán a ser oposición y a contemplar cómo se gobierna un país.

Twitter: @rojasperezm

lunes, 12 de septiembre de 2011

UN JOVEN DE SETENTA AÑOS

UN JOVEN DE SETENTA AÑOS

Manuel Rojas Pérez
Correo del Caronñí, lunes, 12 de Septiembre de 2011

Acción Democrática cumple mañana 70 años. Junto con el Partido Comunista, la tolda blanca es la organización política con más años en Venezuela.

Fue un 13 de septiembre de 1941, desde el Nuevo Circo de Caracas, cuando el maestro Gallegos dijo: “Acción Democrática no ha venido a dividir este campo (el democrático) -en el cual, dicho sea de paso, hemos sido los primeros en presentarnos legalmente organizados-, ni con ánimo intransigente ni apetencias personalistas, sino que por lo contrario está abierta, de par en par como las puertas cordiales, para todos los demócratas venezolanos que quieran reforzar sus filas de buena voluntad con la mejor que les anime y con la añadidura utilísima de talento que les adorne y de la preparación que se haya conquistado. Para todos y muy especialmente para aquellos que ya han librado sus batallas por nuestra democracia, por la recta aplicación de nuestras instituciones, por el respeto debido a los derechos del ciudadano, por el honesto desempeño de la función administrativa y revestidos así del honor de sus sacrificios se han conquistado la confianza y el aprecio público”.

Fue ese mismo día, hace setenta años, donde Rómulo Betancourt dio uno de sus más recordados discursos. Ahí esbozó la importancia de los partidos políticos para la democracia. Y el tiempo le dio la razón: setenta años después, sumidos en el más grosero de los ataques contra los principios democráticos por parte del gobierno fascista del comandante Chávez, solo por medio de los partidos políticos se han logrado resultados políticos concretos: las victorias del 2008, la creación de la MUD, la mayoría del Parlamento en 2010. Y en el 2012 tendremos el resultado más importante: la victoria del candidato que resulte electo en las primarias. Y todo ello gracias a los partidos políticos, jugando Acción Democrática un papel fundamental y protagónico.

Acción Democrática ha venido escribiendo buena parte de la historia venezolana. Ya sabe lo que es luchar, desde la legalidad y la clandestinidad, contra autoritarismos. Los adecos han conocido la cárcel como Carnevalli o Isabel Carmona de Serra, el destierro como Betancourt, Leoni y tantos otros, han dejado vidas de por medio como Leonardo Ruiz Pineda, asesinado por las fauces de la dictadura perezjimenista o Evangelina Carrozo, caída en el gobierno actual. Esto hace de los adecos los más experimentados en la batalla política contra la autocracia chavista.

En setenta años, los adecos han tenido grandes aciertos y grandes errores. Lo importante es que se ha demostrado que han aprendido de ello. Hoy día, Acción Democrática puede ver hacia adelante con orgullo, a sabiendas que su historia es mucho más que las faltas. La mayoría de las obras fueron creadas en gobiernos blancos: hospitales, escuelas, carreteras, autopistas, prisiones centrales eléctricas, represas… hay una gestión que mostrar, unos hechos innegables.

Con setenta años a cuestas, Acción Democrática sigue siendo un partido joven, ya que es la que activa la chispa y vigor a la política venezolana. La llamada maquinaria adeca sigue siendo una leyenda, con la que todos los precandidatos a las primaras desean contar, ya que saben que sigue siendo la estructura electoral más fuerte, más importante y más aceitada de todas. Acción Democrática ha sido en la MUD la gran bisagra que ha permitido que la unidad no se resquebraje, sino que por el contrario, se afiance.

Rómulo Betancourt, hace exactamente setenta años, dijo unas palabras que son perfectamente aplicables hoy día: “Nosotros, los hombres de Acción Democrática, partido afirmativo y con fe en las reservas de la nacionalidad, decimos que Venezuela no está perdida. Puede salvarse, debe salvarse y se salvará. Su situación difícil será corregida, si en los hombres y en las mujeres de este país -los que están en el gobierno y los que estamos en la oposición- se afirma el sentido de la responsabilidad hacia la tierra donde nacimos, y nos empeñamos todos en hacerla tramontar la crisis económica y fiscal que la agobia, y la ayudamos a salir de ella fortalecida”.

Twitter: @rojasperezm

viernes, 9 de septiembre de 2011

Desafíos de la Administración Pública en Latinoamérica (IV): La Descentralización

Desafíos de la Administración Pública en Latinoamérica (IV):
La Descentralización

Manuel Rojas Pérez

En mis clases de Derecho Administrativo les explico a mis alumnos el concepto de descentralización con un ejemplo: “usted vive en el pueblo de El Maco, en Margarita, estado Nueva Esparta. Si tiene un tubo de agua roto en la puerta de su casa que no le deja entrar o salir de ella, tiene que pedirle a alguien que le repare esa situación correspondiente al Estado. Con la centralización, usted tendría que salir de su casa, tomar un autobús hasta Punta de Piedras, agarrar el Ferry, llegar a Puerto la Cruz, tomar un autobús que lo deje en Caracas, para de ahí tomar otro autobús hasta Miraflores, para colocarse en la reja a esperar a que alguien le atienda algún día y poder denunciar el bote de agua. En cambio, con la descentralización, usted puede cruzar la calle y tocarle la puerta de su casa al alcalde, al concejal o al miembro de la junta parroquial para que se haga responsable por ese mal funcionamiento de la actividad pública y reparen el bote de agua”.

Con ese ejemplo les explico a mis alumnos que la descentralización es el verdadero acercamiento del poder al pueblo, a la gente. No es solo decir de la boca para afuera que se le otorga más poder al pueblo, sino que ese acercamiento se haga palpable.

La descentralización de la toma de decisiones económicas y políticas y la competencia efectiva ha sido la estructura institucional subyacente para los cambios organizacionales que permiten a las economías y democracias modernas cosechar los beneficios de la tecnología. El uso de la información y el conocimiento constituye ahora la ventaja competitiva de las naciones. Las sociedades requieren de cambios organizacionales que concreten los procesos de democratización y descentralización. La base simbólica y material de las democracias no está circunscrita exclusivamente a la participación en las instituciones económicas y políticas, sino también en el acceso al uso ampliado del conocimiento, la información y la comunicación.

La transferencia de responsabilidades de planeación, administración y asignación de recursos del gobierno central a los gobiernos estatales y municipales han hecho importantes avances aún en países donde ya existía el sistema federal, como el caso de Argentina y Brasil, donde los gobiernos estatales detentan un gran poder político. En menor medida México a pesar de la reforma municipal de 1984 y Venezuela en donde los gobernadores eran designados hasta 1989 que, con la Ley Orgánica del Régimen Municipal se le permitió a los ciudadanos elegir de manera directa a sus gobernadores, alcaldes, concejales y miembros de juntas parroquiales.

Sin embargo, se cuestiona la capacidad de los gobiernos estatales y municipales para administrar los servicios públicos de seguridad social, educación y salud, entre otras razones porque son sujetas a la cooptación de elites económicas y políticas locales. Nada más incorrecto. El policía, el docente y el médico que conocen su región, que además de eso tiene cerca los lineamientos de sus factores políticos hacen que estos tengan una mejor ejecución de las políticas públicas.

Me explico: la Dirección de Educación de una Alcaldía es la que conoce a fondo las realidades educativas diarias de su sector. Quien mejor que esa Dirección para establecer los lineamientos a su docente para que este a sus alumnos. Igualmente en materia de salud. Cada sector puede tener problemas distintos: en un sitio habrá paludismo, en otro dengue, en otro traumatismos severos por accidentes automovilísticos… solo desde la perspectiva local puede conocerse cuál es la realidad del sector y como debe abordarse de manera coherente.

Latinoamérica, y muy especialmente la Venezuela chavista, no se ha caracterizado por entender la importancia de la descentralización. Esta no es solo acercar el poder al pueblo, sino realmente permitir a la Administración Pública a conocer los problemas reales, diarios, cotidianos, cercanos a la gente, para poder resolverlos con eficiencia y certeza.

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Desafíos de la Administración Pública en Latinoamérica (III): Reforma del Estado desde lo económico

Desafíos de la Administración Pública en Latinoamérica (III):
Reforma del Estado desde lo económico

Manuel Rojas Pérez

La reforma del Estado en Latinoamérica tiene como causas las recurrentes crisis fiscales, la globalización de los mercados y los procesos democráticos. La reforma del Estado se determina bajo una orientación de liberalización económico-financiera del mercado, bajo un modelo de Estado mínimo que restringe su papel y limita sus funciones en dichas áreas.

Se realiza sin que se tenga una visión clara del papel que debe desempeñar el Estado y de las actividades que deben realizar las entidades públicas de tal forma que determinen su lugar en la reorientación del sector público.

La reforma del Estado en Latinoamérica abarca tres períodos: el de ajustes de la balanza de pagos y macroeconómico, la reestructuración de los incentivos y los precios relativos.; el segundo período involucra la privatización y la contratación de un gran número de actividades del Estado que se consideran particularmente comerciables en un mercado y, el tercer período que comprende los ajuste institucionales a largo plazo necesario para consolidar y mantener las reformas anteriores.

Esta última reforma implica dos acercamientos. En primer lugar hay un consenso de que el gobierno debería involucrarse solamente en aquéllas áreas donde el sector privado no tiene una ventaja comparativa y en segundo término, que la expansión selectiva o el fortalecimiento de las actividades gubernamentales se requiere para compensar la baja provisión de bienes públicos, incluyendo los servicios básicos.

Como respuesta inmediata a la crisis económica de los ochenta por la que atravesaron los países latinoamericanos se establecen una serie de medidas económicas tendientes a lograr el equilibrio macroeconómico, tales como ajustes en la balanza de pagos, reducción de la escala de la administración, desregulación, reestructuración de incentivos y de precios relativos, descentralización y privatización. Las políticas de ajuste estructural y estabilización económica pretenden garantizar la renegociación y pago de la deuda externa. Estas políticas buscan promover la inversión extranjera, e incentivar empresarios. Se acompañaron de políticas sociales compensatorias. Los países más endeudados, México y Brasil, aceptan las condiciones como intentos para superar sus crisis. Chile fue el primero en lanzar reformas apoyado en un gobierno militar, mientras que México lo hizo con el apoyo de un partido hegemónico.

Pero esas medidas no fueron las mejores ideas. El endeudamiento llegó a ser brutal. Muchas veces se llegó a pensar en Venezuela en plantear un sistema de privatización para honrar buena parte de la deuda externa. El gran viraje de 1989 del gobierno de Carlos Andrés Pérez tuvo mucha justificación en ello.

Hoy día parece claro que la solución va tomando fórmulas intermedias: capitalización con sentido social. Pero esto pasa por evitar un dualismo social en el que se muestra los altos niveles de desigualdad debido a una mala distribución de los beneficios de la riqueza, mientras que una minoría cuenta con todos los recursos, la mayoría vive en niveles inferiores a la línea de pobreza

El Estado debe convertirse no en el gran empleador sino en el gran generador de condiciones para que el sector privado pueda generar puestos de empleo. Ni el Estado puede solo, ni el sector privado tiene músculo para soportar el peso de un país.

Es decir, esa tercera vía de la que alguna vez habló Tony Blair, esa economía mixta, el rechazo tanto a la filosofías del dejar hacer dejar pasar como la del mercado totalmente controlado del marxismo, es lo que debe plantearse en nuestros países. Venezuela debe meterse por ese camino. Es decir, promover la profundización de la democracia, enfatizar el desarrollo tecnológico, la educación y los mecanismos de competencia regulada, a fin de obtener progreso, desarrollo económico y social.

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Desafíos de la Administración Pública en Latinoamérica (II): El pernicioso presidencialismo

Desafíos de la Administración Pública en Latinoamérica (II):
El pernicioso presidencialismo

Manuel Rojas Pérez

El presidencialismo se encuentra enraizado en las constituciones políticas de los países latinoamericanos como una adaptación cultural propia. El poder ejecutivo asume facultades casi supraconstitucionales y el poder de gobernar por decreto.

El presidencialismo es la forma constitucional de régimen democrático dominante en América Latina, con características de un sistema de partidos que varían dependiendo de las circunstancias de cada país.

Argentina, Uruguay y Venezuela se mueven hacia un número mayor de partidos. Chile cuenta con muchos partidos competitivos, mientras que Colombia y Costa Rica con sólo dos partidos fuertes. México fue la expresión de un partido dominante que se mantuvo en el poder por setenta y un años, gracias a un fuerte presidencialismo, hasta que finalmente en el 2000, un partido opositor lo desplazó.

En Latinoamérica es raro que existan gobiernos divididos, como el caso reciente de México, en donde el Presidente confronta la legislatura. El caso de Chile es buen ejemplo, en donde el Presidente tiene la potestad de proponer el presupuesto, mientras que el Congreso no tiene facultades para modificar impuestos y gastos.

Cuando los intereses políticos divergen y el partido del presidente no mantiene mayoría legislativa, se crean problemas de gobernabilidad. En Venezuela, donde el gobierno se acostumbró a tener un Poder Legislativo completamente sumiso, se encuentra actualmente en un atolladero ya que tiene una dura y combativa bancada opositora que limita su accionar abusivo y ramplón.

La mayor parte de las sociedades latinoamericanas fueron gobernadas por dictaduras militares o cívico militares. Los regímenes autoritarios carecen de visión y los logros obtenidos en materia de crecimiento económico y desarrollo social es muy cuestionable. Cuando los presidentes pierden efectividad, el presidencialismo ha prolongado sus crisis como en el caso de Brasil, México y Perú, mientras que en Argentina y Bolivia han renunciado en situaciones similares.

Las crisis económicas debilitaron la acción de los partidos políticos y de los sindicatos. El patrimonialismo se manifiesta en la consideración que confunde la propiedad de los bienes privados y los bienes públicos y los agrupa en sólo patrimonio de quienes detentan el poder político burocrático en los Estados de Latinoamérica.

El presidencialismo tiene como consecuencia negativa que la estabilidad del sistema tiende a depender de una persona, del presidente de la República. El presidencialismo trae como brutal consecuencia la imposibilidad de aminorar las crisis políticas mediante la sustitución del gabinete ministerial. ¿Cuántas crisis políticas hubiese podido evitar Venezuela si existiese un sistema parlamentario con posibilidad de sustituir lo Consejos de Ministros? Las crisis del 27 de febrero de 1989, ,a salida del poder del presidente Carlos Andrés Pérez el 21 de mayo de 1993, la del 11 al 13 de abril de 2002.

Otra de las desventajas del sistema presidencial venezolano, radica en el dualismo del presidente como jefe de Estado y jefe de Gobierno. Un jefe de Estado tiene como característica fundamental ser el símbolo de la unidad e integración nacional, pero, al ejercer también como jefe de Gobierno, esa característica se hace añicos, toda vez que tiene que ejercer un rol de conductor y jefe político, donde se ve obligado a representar a un solo sector de la vida nacional.

El sistema no genera tendencias ni actitudes al compromiso, la negociación ni a la responsabilidad política. En efecto, el presidente de la República tiene la amplitud de gobernar a sus anchas, sin estar intentando negociaciones o pactos con otros sectores políticos.

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Desafíos de la Administración Pública en Latinoamérica (I): Las trampas del populismo

Desafíos de la Administración Pública en Latinoamérica (I):
Las trampas del populismo

Manuel Rojas Pérez

Esta semana iniciaré una serie de artículos dirigidos a analizar los retos del Estado en nuestras realidades contemporáneas latinoamericanas, ya que hay que tener en cuenta que el contexto de la política debe analizarse de forma global.

El sueño bolivariano de formar una gran nación donde todos los iberoamericanos fueran iguales, fue la primera gran utopía latinoamericana. La ola democratizadora llegó a Latinoamérica cargada de esperanzas para hacer realidad parte de este sueño, pero desgraciadamente, en medio de grandes crisis económicas que han profundizado las desigualdades e iniquidades del desarrollo de los pueblos latinoamericanos.

En las últimas décadas, Latinoamérica está pasando por un período de transición múltiple que afecta no solamente a las instituciones económicas, sino también a las instituciones políticas, sociales y culturales, las cuales están internalizando los costos sociales y de beneficencia en términos económicos y de los valores que representan. Décadas de influencia externa en formas muy diferentes han destruido y debilitado los mecanismos de las instituciones tradicionales del modelo de Estado intervencionista, al mismo tiempo que están creando islas de instituciones modernas que resultan ser ineficientes y distanciadas del carácter de la sociedad en su conjunto.

El Estado latinoamericano fue un Estado benefactor, protector e interventor diseñado para dar respuesta a requerimientos cambiantes del entorno capitalista internacional. El poder de los intereses capitalistas hegemónicos externos dominaron e influenciaron estrategias y políticas de desarrollo de los Estados latinoamericanos. Estas se delimitan en un modelo de industrialización sustitutiva de importaciones financiado por inversiones privadas y endeudamiento público, con lo que el Estado asume el papel supletorio del sector público.

Para finales de la década de los sesenta, este modelo de Estado evidencia su agotamiento y entra en crisis, evidenciando sus debilidades: la excesiva burocratización, corrupción e ineficiencia del aparato administrativo que ejerce un presupuesto deficitario e inestabilidad macroeconómica. La inserción subordinada del Estado Latinoamericano en los procesos de globalización emergentes incide en brutales endeudamientos externos. Pero ello nos llevó a los estados latinoamericanos a caer en una trampa aun mucho más maliciosa.

El caso venezolano es un ejemplo de ello: tomando la excusa de la supuesta entrega al imperio americano, nos ofrecieron una utópica visión de liberación del coloniaje y verdadera revolución democrática, pero que tuvo como consecuencia real la instauración de una semi monarquía, con una serie de sujetos que se limitan a manejar los hilos del poder para mantener este, a costa de lo que sea. Irrespetando fórmulas democráticas, Constituciones, libertades personales y hasta vidas. La concepción libertaria con que se vendió a revolución bolivariana se convirtió en un sistema muy similar al antiguo régimen francés, donde el Estado era el Rey y no los ciudadanos.

Por supuesto que las doctrinas neoliberales hicieron –y hacen- demasiado daño a los países latinoamericanos. Entre otros efectos perniciosos de la emergencia de los regímenes de las políticas neoliberales, éstas han constreñido las actividades de los sindicatos, reducido el gasto del bienestar y generado una inseguridad laboral mediante formas más flexibles, pero también más inseguras de trabajo y remuneración.

Pero el costo no puede ser aplicar las medidas totalmente contrarias ya que los polos se atraen y terminan siendo lo mismo. La Ley de Costos y Precios, por ejemplo, termina siendo tan o más desgarradora que cualquier medida del Fondo Monetario Internacional.

Hay que sincerar el efecto de nuestros errores y encontrar vías sostenibles y centradas. Es uno de nuestros retos.

Twitter: @rojasperezm